Comercio
Acuerdo con EEUU: qué productos argentinos se beneficiarían y cuáles se perjudicarían con la baja de aranceles
El tratado bilateral implica la eliminación y reducción de tasas para sectores clave de la economía de ambos países, por lo que ya comenzó a evaluarse qué artículos locales sacarían provecho de ello y cuáles no.
El acuerdo comercial entre Argentina y Estados Unidos anunciado en la víspera implica la eliminación y reducción de aranceles para sectores clave de la economía de ambos países, por lo que ya comenzó a evaluarse qué productos locales se verían beneficiados y cuáles serían perjudicados.
Aunque resta conocer la letra chica del tratado, la baja de tasas apuntaría principalmente a la carne, el acero y el aluminio. Respecto del primer caso, la Casa Blanca precisó en el comunicado en el que confirmó el pacto que las dos naciones se comprometieron a mejorar las condiciones de acceso bilateral y recíproco a los mercados de res.
A ello se suma la elevación de la cuota de carne a importar al territorio estadounidense, que pasará de 20.000 a 80.000 toneladas anuales. Asimismo, el gobierno de Donald Trump destacó que la administración de Javier Milei facilitará la entrada de ganado bovino vivo y de aves de corral en el plazo de un año.
El acuerdo también evalúa otorgar a la Argentina un cupo de exportación sin aranceles para acero y aluminio, que en la actualidad pagan una tasa del 50% a raíz del alza impuesta en los primeros meses del año por el líder republicano.
En tanto, a nivel local se dará acceso preferencial a productos de Estados Unidos de los sectores químico, agrícola y de tecnología de la información, medicamentos, maquinaria, dispositivos médicos y vehículos.
Como contrapartida, la nación norteamericana "eliminará los aranceles recíprocos sobre ciertos recursos naturales no disponibles y artículos no patentados para su uso en aplicaciones farmacéuticas", según precisó la Casa Blanca.
En cuanto a las importaciones de bienes de capital y vehículos, se estima que las restricciones serán prácticamente nulas lo que, en el caso del sector automotriz, implicaría que Argentina dejará de exigir evaluaciones técnicas adicionales para autos estadounidenses.



