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Reforma laboral: 5 datos que muestran la situación actual del mercado de trabajo
La creación de empleo formal se mantiene estancada desde hace 12 años, y en paralelo avanzan la informalidad y otras modalidades de contratación, como el monotributo. En tanto, los salarios registrados siguen cayendo.
El Gobierno nacional envió al Congreso el proyecto de reforma laboral que se debatirá en sesiones extraordinarias.
La iniciativa oficial incorpora la posibilidad de pagar sueldos en dólares y depositarlos en billeteras virtuales, crea un mecanismo alternativo de indemnización, establece un “banco de horas” para compensar las horas extra y también modifica el régimen de vacaciones y las actividades sindicales.
¿En qué contexto el Congreso va a debatir este proyecto?
- 1. El empleo privado, estancado desde hace 12 años
De acuerdo con los últimos datos oficiales, el nivel de desempleo en el segundo trimestre de 2025 fue del 7,6%, lo que implica una suba de 1,4 puntos porcentuales respecto a igual período de 2023 (durante la gestión del Frente de Todos).
En tanto, datos de la Secretaría de Trabajo de la Nación muestran que en agosto de 2025 (último dato disponible) había 12,8 millones de empleos registrados, lo que implica una caída del 3,7% en lo que va de la actual gestión.
De ese total, 6,2 millones son empleos privados, y se perdieron 138.600 desde noviembre de 2023 (-2,2%).
No obstante, el empleo privado permanece estancado desde hace más de una década en torno a los 6 millones de personas. Si se tiene en cuenta el crecimiento poblacional, los números son negativos: mientras que en enero de 2012 los puestos asalariados privados representaban al 22,7% del total de personas en edad laboral, actualmente son el 20,3% (una caída de 2,4 puntos).
- 2. Avanza la informalidad y el monotributo
El estancamiento del empleo privado registrado en los últimos años tiene su correlato en un incremento de la informalidad laboral.
De acuerdo con datos del INDEC, en el segundo trimestre de 2025 el 43,2% del total de personas con empleo se encontraba en la informalidad, lo que implica un incremento interanual de 1,6 puntos porcentuales.
Pero al interior del trabajo registrado también es posible evidenciar un deterioro de las condiciones laborales: la cantidad de asalariados privados sobre el total de registrados cayó del 55,7% en enero de 2012 al 48,4% en la actualidad.
Esta pérdida fue compensada por un aumento del empleo estatal (3% en el mismo período) y el monotributo, que aumentó 4,7 puntos porcentuales.
- 3. Salarios 25% más bajos que hace 10 años
Durante la actual gestión los salarios registrados cayeron 5,5% en términos reales (es decir, considerando la inflación), según datos del INDEC. Esto se debió a una pérdida del 14% de los salarios públicos y del 0,7% en los privados.
Este deterioro salarial, no obstante, no es nuevo: si se mira la serie completa (que comienza en 2016), los salarios registrados cayeron 24,8% real (-33,3% los públicos y -19,8% los privados).
En tanto, la Secretaría de Trabajo (que a diferencia del INDEC -que se basa en encuestas- considera los registros de pago registrados) mostró que en agosto de 2025 (último dato disponible) los salarios privados aumentaron 0,5% con relación a igual mes de 2023. No obstante, mantienen una caída del 6% con respecto a 2015.
- 4. Uno de los costos de contratación más altos del mundo
Uno de los debates en torno a la reforma laboral estuvo relacionado con los costos de contratación de un empleado. El proyecto de ley del Ejecutivo propone una rebaja de 4 puntos en los aportes (1 destinado a las obras sociales y 3 al sistema de previsión social).
Actualmente, un trabajador aporta el 17% de su salario bruto (es decir, antes de los descuentos) al sistema de previsión social (aportes jubilatorios, obra social y PAMI). En tanto, el empleador abona otro 27% (a los conceptos aportados por el trabajador se suman aportes a las asignaciones familiares y ART).
Esto significa, por ejemplo, que un trabajador que tiene un sueldo bruto de $ 1 millón cobra $ 830 mil, pero el empleador desembolsa en total $ 1.270.000.
De acuerdo con un estudio del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF) que dirige Nadín Argañaraz y compara los costos laborales de todos los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), Argentina se ubica en el tercer puesto entre los países con mayores costos laborales, sólo por detrás de Austria y Francia.
- 5. Aumentan los juicios laborales pese a que bajan los accidentes
Según datos de la Superintendencia de Riesgos de Trabajo (SRT), la cantidad de juicios laborales aumentó 135% entre 2010 y 2024.
Si se tiene en cuenta la cantidad de personas asalariadas registradas (es decir, que se encuentran en relación de dependencia), la proporción de juicios laborales por cada mil habitantes se duplicó: pasó de 6,1 a 12,9.

En conclusión, los datos muestran que el mercado laboral argentino arrastra problemas estructurales de larga data —alta informalidad, baja tasa de empleo y fuertes brechas entre sectores y regiones— que no se explican por una sola variable ni se resuelven con una única reforma. Cualquier cambio en la legislación laboral impacta sobre un escenario ya frágil, condicionado por la dinámica macroeconómica, el nivel de actividad y la capacidad del sistema productivo para generar empleo de calidad.
Por eso, más allá del debate normativo, la discusión de fondo sigue siendo cómo combinar reglas claras, protección de derechos y condiciones que permitan ampliar el empleo registrado, mejorar los ingresos y reducir la precariedad que hoy define a una parte significativa del mundo del trabajo.



